Triage en perros y gatos: Priorización eficaz en emergencias veterinarias

 7 abril 2025  News  

Los casos de emergencia pueden presentarse en cualquier momento. Todos los veterinarios de pequeños animales necesitan tener las habilidades necesarias para realizar un triage y estabilizar los casos de emergencia más comunes, incluso si los pacientes necesitan ser derivados a otro centro.

¿Qué es el triage?

El triage se utilizó por primera vez en la medicina durante la Primera Guerra Mundial. Hoy en día, se emplea ampliamente en la medicina humana y veterinaria para evaluar a los pacientes en función de sus necesidades, en situaciones donde no todos los pacientes pueden ser atendidos de inmediato debido al personal limitado o a un alto número de pacientes.

¿Cómo realizar un triage en los pacientes?

Una evaluación de triage implica un examen físico y una clasificación del estado del paciente según un sistema estándar.

El primer paso en la evaluación de un paciente consiste en comprobar si presenta dificultad respiratoria, posible shock, falta de respuesta a estímulos, arritmias, convulsiones, hemorragias, colapsos o traumatismos. En todas estas situaciones, los pacientes se clasifican comúnmente en la «categoría roja» y necesitan tratamiento inmediato y estabilización antes de ser trasladados, si procede, a otro centro.

Estabilización de emergencias

  • Los pacientes con dificultad respiratoria necesitan NOSE (por sus siglas en inglés): oxígeno, sedación y colocación de un tubo endotraqueal (intubación), si es necesario.
  • Los pacientes con status epilepticus (actividad convulsiva durante más de 5 minutos o 3 o más convulsiones en un periodo de 24 horas) o con convulsiones en cluster (2 o más convulsiones en un periodo de 24 horas) necesitan tratamiento inmediato de la convulsión. Si llegan a la clínica durante una convulsión, diazepam (1 mg/kg administrado por vía rectal) o diazepam/midazolam (0,5 mg/kg por vía intravenosa en perros), repitiendo según sea necesario cada 2 o 3 minutos hasta un máximo de 3 veces. Una vez estabilizado el paciente, se debe determinar la causa de las convulsiones.
  • Aquellos pacientes que han colapsado pueden no ser capaces de sentarse, pero están conscientes y alertas de su entorno. Es importante evaluar la causa del colapso (por ejemplo: insuficiencia cardíaca congestiva, derrame pericárdico, enfermedad neurológica, electrocución, ingestión de toxinas, golpe de calor [especialmente común en razas braquicefálicas], shock anafiláctico, sepsis, tromboembolismo aórtico, taquiarritmia o bradiarritmia) y estabilizar al paciente en consecuencia.
  • Los pacientes con hemorragias agudas pueden estar sufriendo daños físicos en un vaso sanguíneo o una coagulopatía —incapacidad de formar coágulos— y no dejarán de sangrar hasta que se aborde la coagulopatía. El paso más importante es detener la hemorragia aplicando presión con un vendaje y/o un torniquete. Cuando estas medidas no funcionan, puede ser necesario sedar al paciente, utilizar agentes hemostáticos o incluso realizar una reanimación si es preciso.

Otras situaciones

Pacientes con dificultad respiratoria moderada o leve, hemorragias menores, inclinación de la cabeza, mucosas pálidas sin shock, líquido abdominal, vómitos persistentes, melena, alteración del nivel de consciencia, posible ingestión de toxinas o cuerpos extraños, fracturas, parto activo, dolor moderado, prurito intenso, debilidad generalizada, deshidratación, obstrucción uretral o hematuria sin estranguria pertenecen a las categorías intermedias de triage, típicamente «naranja» y/o «amarilla». Estos pacientes deben ser evaluados una vez que los de la categoría «roja» estén estabilizados.

Los pacientes con condiciones como vómitos, tos, soplo cardíaco, una convulsión reciente pero aislada, dolor leve, prurito o inflamación localizada entran en la denominada categoría «verde» y pueden ser atendidos al final.

Conclusión

Un sistema de triage es esencial para organizar a los pacientes y tratarlos adecuadamente según la gravedad de su estado. Los pacientes de emergencia siempre necesitan estabilización antes de ser trasladados a otro centro veterinario.

Referencias